Oruro recibió el nuevo año 2016 con un apagón que alteró las actividades familiares y públicas. Las fiestas se suspendieron en los locales públicos. Otros tuvieron que quedarse en medio del silencio y la oscuridad, durante 45 minutos, tratando de buscar una solución al gravísimo problema de la Empresa de Luz y Fuerza Eléctrica (Elfeo), controlada por el Gobierno.
El apagón se registró desde las 02.15 hasta las 03.00 horas del 1 de enero del 2016. Los dueños de casa quisieron arreglar el problema, revisando los cables de la vivienda, donde estaban reunidos los familiares, sin resultado alguno. No había ni siquiera velas, para cualquier emergencia.
Ningún orureño había previsto semejante problema. “Esto es increíble. No puede haber ocurrido en Oruro”, afirmó Eduardo Camargo Sánchez, un ciudadano que llegó después de cinco años a esta ciudad, para visitar a sus familiares.
El Hospital General San Juan de Dios también sufrió las consecuencias del apagón. Los médicos tuvieron que utilizar linternas y velas para atender los partos, especialmente. Ese día, se registró siete partos, con siete niños recién nacidos. Según los médicos, “se tuvo que trabajar en forma normal”.
El responsable de la subestación Este de la Empresa de Luz, Edson Villarroel, confirmó que el apagón se prolongó durante 45 minutos y afectó a toda la ciudad, como consecuencia de un accidente que tuvo un camión.
El motorizado, no identificado hasta ayer, arrastró los cables de la subestación Este hasta cinco cuadras.
El corte de energía eléctrica llegó a todas las zonas de la ciudad. En los locales públicos, se suspendieron las fiestas. No había música para bailar ni para cantar ni para alegrarse. Había un silencio sepulcral, después de varios minutos de espera. Al principio, se registró un griterío infernal.
Los garzones salieron en forma inmediata de los locales, hacia la calle, para buscar alguna explicación del hecho, pero se verificó que la ciudad estaba a oscuras. No había luz por ningún lado.
Desde lo alto de los edificios, se podía apreciar que la luz se había cortado en toda la ciudad. Solamente algunos vehículos circulaban en las calles con las luces encendidas, especialmente por la calle principal, la 6 de Octubre.
La espera fue muy prolongada. Hombres y mujeres estaban con ganas de continuar la fiesta, pero tuvieron que retirarse a su domicilio. No había solución al problema, aunque los garzones compraron velas y utilizaron linternas para atender a los clientes.
“La fiesta se terminó”, tuvo que decir el dueño de un local. Dijo que la recepción del Año Nuevo les ha significado una pérdida económica para los locales de fiesta, porque muchos tuvieron que retirarse, sin cumplir los deseos de hacer una buena recepción al año 2016.
Según la empresa de luz, el daño fue reparado, pero los vecinos de la zona Este de la ciudad advirtieron que no había energía eléctrica hasta después de las 12 horas del mismo día. A pesar del apagón, se continuaban las fiestas, sin música, tratando de animar la llegada del nuevo año.
Desde lo alto del Hotel Plaza, se podía apreciar una luz muy lejana por la zona de Capachos. No había luz en la Terminal, otro edificio grande. Los cerros de la ciudad de Oruro estaban oscuros. Ni siquiera había luz en el monumento a la Virgen del Socavón, ubicado en la cima del cerro Santa Bárbara.
“Esto es un urbanicidio”, afirmó el presidente del Comité de Defensa del Patrimonio Cultural y Natural de Oruro, Carlos Delgado. Ni siquiera se pudo ver el monumento de la Virgen, para tener alguna referencia nocturna. El apagón dejó en la incertidumbre a todos. “Esto solo pasa en Oruro, al igual que la destrucción de la Plaza del Socavón, para hacer un proyecto suntuoso, llamado teleférico, que no lo necesitamos, sino solamente para demostrar el falso poder, el autoritarismo”, dijo.
La Empresa de Luz se congestionó con las llamadas telefónicas. Todos querían saber qué es lo que había pasado y nadie daba explicaciones al respecto. La empresa fue nacionalizada por el gobierno del presidente Evo Morales.
A pesar del apagón del sistema de energía eléctrica, se podía ver en el cielo orureño algunas luces artificiales de los fuegos pirotécnicos. Antes, durante y después de la llegada del año 2016, en los primeros minutos, había gran cantidad de fuegos artificiales encendidos. El entusiasmo de la gente se apagó a las 2:15 horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario