Cinco concejales de la ciudad de Oruro iniciaron ayer una huelga de hambre en las mismas oficinas, para exigir la elección de un nuevo directorio del Concejo Municipal, después de siete meses de gestión, pero el presidente de esa institución, Henry Rojas, dijo que el ayuno “es ilegal”.
Rojas, que era seguidor de la exalcaldesa Rossío Pimentel Flores, explicó que el directorio ha sido elegido el 4 de junio de 2015 y “no existe razón para pedir una nueva elección, porque se debe cumplir un año de gestión, ya que no se puede elegir directiva cualquier rato”.
La declaración fue emitida ante la presión que soporta el directorio del Concejo Municipal, para que se incorpore en el orden del día la renovación de la directiva, en forma extraordinaria. El pedido tiene respaldo de ocho de los once concejales del municipio de Oruro.
Osvaldo Olivera, Hilaria Sejas, Janet Ledezma y José Rojas, militantes del Movimiento Ciudadano San Felipe de Austria, exigen la sesión de urgencia, porque “se deben aprobar muchos proyectos presentados por el alcalde municipal, Édgar Bazán Ortega”.
A los cuatro concejales, también se sumaron Magda Suaznabar y Segundina Ledezma, del Movimiento Al Socialismo, mientras que David Choque, de Participación Popular, anunció su apoyo a la renovación de la directiva al igual que Denisse Villca del partido Inca FS. Saúl Aguilar de los Demócratas y Max Cabrera de INCA-FS, se mantienen leales a Henry Rojas.
Según informe del presidente del Concejo Municipal, Henry Rojas, lastimosamente, los concejales del MAS “se han dividido” y ahora solo se ha quedado él, con apoyo de Saúl Aguilar y Max Cabrera, de otros partidos políticos.
Rojas dijo que el caso se denunciará a las instancias que corresponde, porque “no se puede cortar la gestión a los siete meses, cuando claramente la ley indica que se debe mantener el mandato de la directiva, por un año, porque de lo contrario, se estaría vulnerando la ley”.
En cambio, el concejal del Mcsfa, que se alió con el MAS, José Rojas, dijo que si no se convoca a la sesión, “se adoptarán medidas más radicales, para no perjudicar a Oruro, porque hay mucha documentación guardada en el despacho del presidente”.
La concejal Denisse Villca denunció que como concejal secretaria, está dispuesta a exigir la renovación de su directiva, por el descontento que existe en la gestión del presidente del Concejo Municipal y advirtió que incluso hay maltrato, porque supuestamente los otros concejales “no tienen grado académico”.
Las divergencias surgieron desde hace un mes, cuando el alcalde municipal, Édgar Bazán, anunció su apoyo por el SÍ a la reelección del presidente Evo Morales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario