viernes, 8 de febrero de 2013

Sebastián Pagador y los hermanos Rodríguez fueron los líderes de la liberación en 1781

Oruro, la tenaz y progresista ciudad fundada el 1 de noviembre de 1606, ha escrito las primeras páginas de la historia que protagonizaron tanto criollos y mestizos, como los propios indígenas, con el signo de la liberación de los pueblos que, en ese tiempo, se oponían con aplomo a un sistema de oprobio que ejercía el gobierno colonial de España al aplicar un sistema de reparto de la producción, la aplicación desmedida de los tributos, diezmos y mitas, además de otras exacciones económicas, en especial, contra los originarios de estas tierras.

La insurgencia contra el sistema colonial se produce a partir de enero de 1781, cuando el corregidor de Paria, a la cabeza de una compañía de soldados se dirige a Poopó y Challapata, para mitigar la acción de los revoltosos que, a la cabeza de Gabriel Tupac Amaro, cacique de Tungasuca, preparaban un alzamiento en Huari.

Los historiadores, sin embargo, consideran que se produjo en aquella oportunidad, un hecho paralelo que exacerbó los ánimos, tanto en la Villa de Oruro, como en las poblaciones rurales de Challapata, Poopó y Huari. Se trataba del partido criollo que le hacía frente al partido europeo, los cuales, se disputaban el poder y, de esta manera, los cargos más importantes del Cabildo de Oruro.

El levantamiento se produjo el día sábado 10 de febrero, coincidentemente, cuando ambos partidos se enfrentaron en sus calles. Los del partido europeo contra los criollos y mestizos, cuyos principales protagonistas fueron los hermanos Juan de Dios y Jacinto Rodríguez y Herrera, quienes se convirtieron en los principales soportes de la revuelta ciudadana que Sebastián Pagador, con su sentimiento revolucionario provocó la insurgencia contra el yugo español.

Los hechos que se suscitaron en enero de aquel año, precipitaron los acontecimientos, cuando se aprestaban a asignar funciones, aparece como un cacique importante del Bajo Perú, Gabriel Tupac Amaro, cacique de Tungasuca, quien asume un protagonismo al concentrar a las comunidades indígenas, para tomar las principales ciudades. Estos anuncios que flotaban en el ambiente de Oruro, sembró el temor y pánico entre las autoridades españolas. El domingo 14 de enero, las tropas establecidas en Challapata hicieron rondas por todo el pueblo, ya por la noche se escucharon cornetas de convocatoria a todos los indígenas de las comarcas vecinas y otros que se habían dado cita en el sector al enterarse del arresto de los tres líderes.

Juan de Dios Rodríguez, asumió el cargo del gobierno del corregimiento de Paria, mientras que Juan de Dios, en la Villa de Oruro, pero no fue reconocido por la Audiencia de Charcas.

En Oruro se tenía la idea de que la próxima villa a tomarse era precisamente la de Oruro por los conflictos que se suscitaban en los alrededores, ante estos acontecimientos el Corregidor Ramón de Urrutia llamó a una reunióin del Cabildo de manera urgente para tomar las medidas defensivas de la Villa, quedando entre sus medidas más improtantes el acuartelamiento de milicias de Españoles, Negros, Criollos y Mestizos con la asignación de comandantes de cada una de ellas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario