Si bien es cierto que la minería fue la principal fuente de ingresos económicos de la ciudad de Oruro y el motivo de su fundación el año 1606, cabe recalcar que actualmente una gran parte de la economía de Oruro se cimienta en la actividad comercial, pues más del 50% de la población se dedica al comercio formal e informal.
La situación geográfica en la que se encuentra la ciudad de Oruro contribuyó de gran manera para que se consolide el comercio, puesto que es parte fundamental del corredor bioceánico que une al océano Pacífico con el Atlántico, permitiendo una constante circulación de mercadería.
Lamentablemente, debemos decir que esta situación geográfica no es bien aprovechada por las autoridades, ya que varios proyectos con relación al comercio, como el Puerto Seco, continúan postergados a falta de estrategias económicas.
Por otra parte, la falta de recintos aduaneros acorde con la cantidad de mercadería que ingresa a Oruro, hace que los comerciantes prefieran hacer los trámites de desaduanización de su mercadería en otros departamentos, lo cual provoca una reducción del 60% en la actividad comercial de la región.
Según informes de los comerciantes de la Súper Feria, que son los principales importadores de mercadería, las recaudaciones aduaneras por concepto de importación en Oruro disminuyeron al 6 % y se incrementaron para el departamento de Santa Cruz al 48,5 %, esto no sólo afecta al sector del comercio sino a toda la actividad económica de la ciudad.
Respecto a la consolidación de empresas orureñas, debemos mencionar que desde el 2002 existió un incremento sustancial, ya que según datos estadísticos de Fundempresa el 2002 se registró a 294 empresas y el 2011 esta cifra se incrementó a 2.966 empresas registradas de diferentes rubros.
Sin embargo, se debe indicar que varios empresarios determinaron migrar a otros departamentos o cerrar sus negocios por falta de políticas económicas que incentiven y garanticen la actividad empresarial, lo cual incide en el número de personas desempleadas.Asimismo, es mínimo el apoyo que las autoridades otorgan a los microempresarios que están en pro de consolidar sus negocios, esperemos que el anuncio que hicieron las autoridades respecto a la construcción del Eco Parque Industrial para este sector, se consolide y no sea uno más de los tantos proyectos frustrados.
Se prevé que esta infraestructura sirva para que los microempresarios puedan instalar sus talleres y recibir cursos de capacitación de forma constante para mejorar la calidad de sus productos y ser competitivos en el mercado externo.
Es necesario fortalecer la capacitación y mejorar la tecnología para lograr que una mayor cantidad de productos puedan ser exportados, a la fecha los que más se exportan son las artesanías, especialmente las prendas de vestir hechas a base de lana de alpaca o de llama, estos productos son cotizados en el mercado europeo.
Son varias las demandas que tiene el sector empresarial, una de las principales es la aprobación y promulgación de la ley de preferencias económicas para impulsar el desarrollo productivo en Oruro, esto permitirá atraer inversiones que incidan en la ejecución de proyectos, generando fuentes de trabajo.
Por otra parte, la reactivación económica es un pedido constante que realizan desde hace muchos años los empresarios, plantean que a través de esto se pueda llegar a una buena administración de la inversión regional con enfoque selectivo para poder concretar proyectos dirigidos al desarrollo integral, así como la dinamización de la economía departamental y municipal en base a criterios técnicos.
También sugieren definir la vocación de desarrollo macrorregional y determinar sus potencialidades, además de promover el respeto a las inversiones y establecer mecanismos jurídicos para atraer capitales extranjeros.
Para lograr que Oruro vuelva a ser el motor económico fundamental de desarrollo del país como en otrora, debe existir compromiso de cada uno de los habitantes de esta Alta Tierra de los Urus y principalmente de sus autoridades.
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