El Censo de Población y Vivienda en la jurisdicción del departamento de Oruro movilizó a 10.200 personas, entre empadronadores, efectivos militares y policiales, para que el conteo sea efectivo y cubra la cantidad de habitantes en la ciudad y en las 16 provincias.
El director regional del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Aldo Cabrera, confirmó que para el censo se habilitaron 8.500 personas, entre las cuales se encuentran 3.000 efectivos militares, tanto de la ciudad como de las provincias, que han sido preparadas para la realización de ese trabajo, particularmente en las comunidades rurales más alejadas.
El coronel Wenceslao Zea, Comandante Departamental de la Policía, explicó que los 1.400 efectivos de su institución han sido dispuestos en emergencia, para recorrer diferentes zonas de la ciudad.
La conferencia de prensa se realizó el martes antes del mediodía en la Gobernación de Oruro, donde explicaron detalles de la organización prevista para la tabulación de datos. “El censo se realizará casa por casa, con la participación de los empadronadores que han sido preparados para esta clase de tareas”, expresó Cabrera.
Asimismo, se dispusieron de 600 a 800 autorizaciones para la circulación de vehículos y personas que tengan emergencias, empezando por las ambulancias y continuando con los medios de comunicación que requieren recabar información sobre el trabajo del censo. También se han entregado credenciales y autorizaciones para algunas fuentes de trabajo que han efectuado su solicitud con anticipación.
“Para cada empresa, se ha dispuesto un máximo de 5 vehículos, para el traslado de sus trabajadores, son casos de instituciones que no pueden paralizar sus funciones, como la fundición de estaño”, expresó el coordinador del censo, David Murillo.
Por su parte, los funcionarios de Tránsito han emitido un rol de últimas salidas a diferentes lugares del departamento de Oruro. El último vehículo en salir de la Terminal de Buses se registró a las 18:00 horas del martes, con destino a Challapata y Llallagua. Posteriormente, el edificio fue cerrado, de acuerdo a las instrucciones previstas en el auto de buen gobierno, emitido por el gobernador Santos Tito Veliz.
“Hemos decidido cerrar la terminal a las 18:00 horas. A partir de ese momento, nadie más puede salir ni ingresar a ese recinto. Esa instrucción fue impartida a todos los funcionarios que trabajan en esa institución”, explicó en declaraciones preliminares el coronel Ruffo Muñoz, jefe de Tránsito en la terminal.
Los últimos viajes a Tarija se iniciaron a las 9:00 horas, mientras que a Iquique y Uyuni se registraron hasta las 12:00 horas, bajo responsabilidad de los conductores, para que lleguen a su destino antes de las 24:00 horas.
“No queremos que los vehículos y los pasajeros estén estacionados en medio de la carretera. Por ese motivo, se ha dispuesto las últimas salidas hasta ese horario determinado”, expresó el funcionario policial.
El Censo de Población y Vivienda se inició a las 6:00 horas de ayer, con el desplazamiento y la visita casa por casa. “Esperamos que todos se hagan censar. No se abrirán las tiendas ni los puestos de venta en los mercados. Todo debe estar cerrado, para esperar a los empadronadores”, afirmó Aldo Cabrera.
Por último, aclaró que a partir de las 00:00 horas del miércoles se controló estrictamente la circulación en las calles de los peatones, con excepción de los policías y empadronadores.
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