Investigan la desaparición de un cadáver del Cementerio General

Por casualidad, se descubrió la desaparición del cuerpo de Celestina Alizares viuda de Maiz que el 2007 fue enterrada en el Cementerio General y que debió permanecer en el mismo lugar hasta el 2012, pero grande fue la sorpresa cuando una de sus hijas que retornó de Estados Unidos, al llegar ante el nicho de su madre verificó que otra persona estaba enterrada, lo que motivó el inicio de una investigación sobre este hecho.

La administradora del Cementerio General, Ruth Mamani Lazarte, informó que corresponde iniciar la investigación con el personal de la gestión 2010, año en el que se encontraba como administrador Raúl Centeno.

Para coadyuvar con la investigación, se revisó toda la documentación; como el libro de registro de inhumaciones donde se encuentra además el día y hora de internación al nicho, datos que se encontraron y se verificaron que Celestina Alizares, fue inhumada el 13 de junio de 2007.

A partir de esa fecha sus familiares pagaron el alquiler del nicho hasta la gestión 2012 por cinco años, tiempo en el que deben permanecer los cuerpos para renovar el convenio.

"Lo más curioso es que la gestión 2010, Nieves Álvarez viuda de Escóbar fue enterrada en el mismo nicho de quién también se pagó el alquiler del espacio por los cinco años, es decir aproximadamente hasta el 2015 por lo que se advierte que existe una contradicción entre los funcionarios de ese entonces", refirió.

ALCALDESA

A través del Canal 39, la alcaldesa Rossío Pimentel, que conocida la denuncia, el miércoles se hizo presente en el campo santo, con total sorpresa por la desaparición del cadáver; instruyó el inicio de investigaciones para establecer responsabilidades y transmitió su pesar a los familiares de Celestina Alizares.

Pimentel llamó la atención a los trabajadores y sus dependientes aprovecharon para hacer conocer sus condiciones de trabajo, reclamando la dotación de guantes y protectores para la nariz y la boca y así resguardar su integridad física al momento de exhumar los restos, pues existe emanación de gases que afectarían su sistema respiratorio.

La autoridad, conocido el panorama, hizo referencia incluso a la necesidad de dotación de leche para los panteoneros, quienes a diario deben estar en contacto con restos de difuntos apilados en sacos y depositados en un ambiente del cementerio, viéndose obligados a inhalar polvillo que deprenden los cadáveres, según se pudo conocer de la versión expresada por los trabajadores a la alcaldesa, cuando llegaron al lugar las cámaras televisivas.

En su intención de encontrar algún indicio sobre la desaparición del cadáver, Pimentel revisó incluso los depósitos de lápidas retiradas de los nichos desalojados, pero no halló nada.

NICHOS

Ruth Mamani, informó que desde que asumió el cargo hace tres meses, verificó que existe exagerada demanda de nichos, porque si bien se desocupan algunos nichos por abandono de los familiares de los difuntos o por haber cumplido el tiempo de alquiler, al día siguiente se copan estos espacios.

La exhumación de los cuerpos se realiza con previa documentación tal como se dispone en la ordenanza 081/08 y la 43/11 donde se dispone que la administración del Cementerio General debe proceder en primer lugar a notificar, dando un tiempo de 30 días para que los familiares puedan prever donde quedarán los restos de sus seres queridos.

Se realiza las exhumaciones después que transcurrieron más de diez años en algunos casos, aunque la normativa dispone cinco y otro porque algunos nichos no tienen el nombre del cadáver, ni la fecha de fallecimiento, porque no se puede adivinar de quien se trata para ubicar en los libros", manifestó.

"Para mí, este es un caso especial porque la familiar, dice que tenía el nombre y la foto en el nicho y no sé hasta dónde es cierto, pero hay muchos casos que no llevan el nombre ni la fecha de fallecimiento", explicó la administradora del cementerio.