El panorama nocturno es agradable, con un espectáculo de luces de color y chorros de agua que llamaron la atención de los transeúntes, esta obra cambió la imagen de la zona y se rescata un área destinada a la recreación y esparcimiento, aunque frente a esta mejora paisajística, se encuentran locales de expendio de bebidas alcohólicas, de donde todas las noches salen personas ebrias y provocan escándalos, se escuchan gritos, se asaltan a las personas y no hay autoridad que ponga freno a este hecho que tiene en vilo a los vecinos del sector.
Según informe del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO) este paseo turístico costó alrededor de 1,5 millones de bolivianos y las obras incluyen andenes peatonales, ramplas, jardineras de ladrillo visto, revoque de piedra laja, iluminación y una fuente ornamental de agua con luces de color en forma de arco, por donde transitan los ciudadanos.
También se colocaron bancas, se instalaron puntos de luz y esculturas en fibra de vidrio que corresponden a las figuras de Juan de Dios, Jacinto Rodríguez y Luis Mendizábal Santa Cruz.
Fueron 1.200 metros cuadrados, donde se realizaron los trabajos a lo largo de más de un año, lo que era bastante cuestionado por los vecinos, ya que aseguraban que eran sólo tres cuadras y la obra no concluía, lo que daba un mal aspecto al sector, además de existir contaminación por los escombros acumulados, al margen del riesgo para quienes se desplazaban por el sector.
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