Quillacas es un pueblo misterioso, fundado el 20 de mayo de 1501 por el juez visitador español José de la Vega Alvarado. Está ubicado a 180 kilómetros al Sur de la ciudad de Oruro y pertenece a la provincia Eduardo Avaroa, donde sus documentos históricos son guardados en forma celosa por los habitantes de esa población.
Hace tres días, el Ministerio de Autonomías ha devuelto los documentos originales de Quillacas. Uno de los documentos es de 1571, donde “los jueces españoles identificaron los mojones de delimitación de las comunidades de Salinas, Pampa Aullagas y Quillacas”. Entre los documentos no se menciona a Coroma, aunque los comunarios de esa población potosina también sostienen tener títulos antiguos que datan precisamente de la época de la colonia.
Quillacas, sin embargo, es conocido por su antigüedad, pero especialmente por el santuario construido, como se hacía en esa época, con un plano traído desde España, en forma de cruz, porque se escogía un lugar adecuado para que sea sagrado para todos. Los habitantes de aquella población asimilaron rápidamente esa cultura religiosa y hasta hoy mantienen intacto al Señor de Quillacas, una imagen de Cristo. La fiesta de este pueblo es el 14 de septiembre, donde también miles de personas se reúnen para participar en la celebración.
Quillacas, casi siempre está vacía, lo que no significa que nadie habite en el lugar. Hay centenares de personas que desde temprano se dedican a trabajar las tierras, mientras que otros siempre están cuidando ese territorio que se considera sagrado.
Por ese motivo, en defensa de esos terrenos, se presentó el 22 de diciembre del 2010, los documentos originales al Ministerio de Autonomías, para que los técnicos y abogados, verifiquen los títulos de propiedad y de fundación de esa población, donde se explican los mojones, los límites de esa población. El Ministerio recibió 72 pruebas originales, entre los que se encuentra el más antiguo de 1571, donde se manifiesta las visitas que realizaron los jueces para “identificar los mojones de delimitación”.
El gobernador Santos Tito Veliz, recogió los documentos originales y los devolvió personalmente a las autoridades de Quillacas, para que sigan guardando esos originales, como hasta ahora, con gran celo y respeto.
Según el jefe de la unidad de límites, Johnny Suárez, “el Ministerio de Autonomías, a través de la dirección general de límites, procedió a la devolución de los documentos originales, legalizados y testimonios que fueron presentados en diciembre del 2010 sobre el conflicto limítrofe denominado “Coroma –Quillacas”.
Los documentos servirán para la confrontación de límites con Coroma, Potosí, y las otras poblaciones aledañas de Oruro, como Salinas y Pampa Aullagas, que están más cercanas. El trabajo de verificación de los mojones continuará la próxima semana, siempre que pase la temporada de lluvias, donde el viento y el frío es constante.
El Santuario de Quillacas, por su relevancia arquitectónica y cultural, fue nominado como Patrimonio Cultural de la Nación, a través de la Ley del 10 de febrero del 2005. Mediante la Ley 3705, del 5 de julio de 2007, se reconoce también como Patrimonio Oral, Cultural y Religioso de Bolivia, a las tradiciones y a la festividad del Señor de Quillacas.
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