Oruro, ciudad cosmopolita, vista desde fines del siglo XIX hasta mediados del siglo XX, tuvo un destino que la consagraba en la modernidad.
La llegada del ferrocarril en 1892, años más tarde una ley determinó la creación de la Universidad de San Agustín, oportunidad para que las minas cercanas a la ciudad fueran explotadas y la llegada de extranjeros deseosos de trabajar e invertir en Oruro, marcaban procesos que en ocasiones definía la vida de los ciudadanos. Era y es ruta necesaria, centro que une los caminos, espacio partícipe de la Guerra Federal que cobijó a centenares de hombres llegados del área rural.
Con la mirada hacia atrás, asumiendo la distancia de sellos remotos y faroles desgastados, recupero algunas manifestaciones consideradas como fuente de comunicación, nuestra historia permite retornar en el tiempo, abrir un espacio y aproximarnos a esas épocas de impacto educativo, económico, social y cultural. Posiblemente en ese tránsito de esperanza, también había exigencia, demanda de tener mejores condiciones de vida, respeto, consideración por el prójimo, valores morales que no solo eran ilustrados en los escritos, eran repetidos una y otra vez por nuestros antecesores.
Con constante frío, viento, y una contaminación avanzada esta noble, leal y bendita tierra de Oruro, identifica su nombre prolongado y eterno como los encuentros de la noche con la luz de la luna, aparece permanentemente en el azul de invierno andino de este planeta. Son inconfundibles sus montañas, la yareta y los colores tenues que rodean a esta puna. He convocado al mar de palabras y recupero un día de remembranza para desentrañar las huellas. Acudí a las fuentes y examiné los escritos, encuentros ceremoniales, infatigables, interminables definitivamente grabados en la memoria de esta alta planicie.
MEMORIAS
La Municipalidad de Oruro, con la misión de hacer conocer resultados de finanzas y en justicia lo que le correspondía, mantenía su función y abundaba en referencias pulcramente impresas en la denominada tipografía o imprenta, dichos antecedentes eran públicos.
El trabajo cotidiano controlado por estadísticas, informes anuales denominado memorias, era excelente antecedente para verificar la responsabilidad especialmente de las autoridades.
El presidente del H. Concejo Municipal, Juan P. Ramos en 1891, instruyó la adquisición de una línea telefónica instalada en Pro-Secretaría. También fueron colocados nueve faroles sobre magníficos postes en la Plaza de Armas (10 de Febrero). La misma autoridad solicitó a la legislatura la subvención que por ley fue sancionada con Bs. 2.000 anuales destinada a la reconstrucción del edificio Beateario y alimentación de las señoras asiladas en la casa de caridad.
En la memoria del presidente del H. Concejo Municipal, señor Eduardo H. Harrison, de 1904, se menciona que la irresponsabilidad de los contratistas no permitió continuar con las obras del teatro, paralizando durante casi 10 meses, el Concejo intercedió y pudo avanzar con la construcción. Desde 1903 y 1904 se logró acumular material especialmente madera para continuar el trabajo.
El Concejo de 1905, contrató para proveer "juegos de agua, piletas, estatua, una pila para la plazuela Castro y Padilla, todo de fierro abronzado, y cuatro docenas de bancos, de las plazas de Francia y Norte América, conforme a escritura que corre en los anexos, por la suma aproximada de Bs. 15.000 que debe consignarse en el Presupuesto de este año".
En el mismo año se contrató a la Empresa Gustavo Hinke & Cía., a cargo del señor Ricardo Vargas, quien instruyó la instalación del alumbrado eléctrico de la población.
En 1907 en el kiosco de la Plaza "10 de Febrero se colocaron ocho focos de luz". Otro anuncio que causó beneplácito, después de algunos inconvenientes la entrega al servicio público de tranvías con una tarifa de 10 centavos por persona y 20 centavos por 100 kilos de carga.
En documento del doctor Manuel A. Elías como Presidente del H. Concejo Municipal y a tiempo de brindar información que respalde la actividad de todos los Concejales celebró la conclusión de las obras del Ayuntamiento (hoy edificio de Coteor y Entel), inaugurada con arquitectura moderna de entonces.
Como la ciudad iba creciendo con sus habitantes, era necesario contar con dos mercados uno ya era denominado como "Plaza Campero" la entrega de planos se había encargado a los señores Francis Morton y Cía. de Liverpool y W.R. Grace & Cía. Es adjudicada, proveyendo con material de fierro, de acuerdo a escritura pública, estaba cerca a la Estación de Ferrocarril de Antofagasta, no necesitó ningún trabajo adicional es decir el suelo estaba en condiciones de construir.
Oruro progresaba, para este propósito se contrató al señor José De la Rosa, para proporcionar un reloj público de fabricación suiza de la "mejor calidad, de cuatro esferas luminosas, de un metro de diámetro con horas, medias horas y cuartos, con un costo de Bs. 1.500".
Nos detenemos en fecha 22 de julio de 1907, definitivamente volvemos a avanzar en salud, por primera vez se vacuna en Oruro a 1.100 niños, es "fluido vacuno hecho por el Instituto Médico de Sucre. No existe registro de variolosis o viruela".
En mayo de 1910 el H. Concejo Municipal y el Ministerio de Gobierno y Justicia, hicieron conocer la vigencia de una Ordenanza Municipal, una publicación ante la opinión pública, se pronunció sobre el arreglo de las calles y prohibió que las carretas que circulen por la ciudad excedan de 3.500 kilogramos, debiendo tener muelles o resortes, los infractores pagarían una multa de Bs. 50.- si deterioraban el pavimento. A partir del 1º de julio no hubo excepciones y se prohibía el tránsito de carruajes o rodados, quienes trasladaban bultos grandes debían llevar en carretelas a almacenes céntricos. La puesta en vigencia de dicho documento, tuvo respuesta inmediata de los miembros del Comercio, solicitando prórroga hasta febrero de 1911 con la rúbrica de N. Murillo Notario Municipal y como testigo José Romano. Sin embargo el Concejo a través del servidor A. Urquidi responde al señor Ministro señalando que "no hubo transgresión de ley alguna, y el H. Concejo asume la responsabilidad de sus actos". Al respecto se manifiesta en un informe el Ingeniero Municipal Julio Knaudt, sobre el Proyecto de Nivelación y Pavimentación de las calles de la ciudad de Oruro. "El principal motivo por el cual se ha dado la forma cóncava a las calles de Oruro, que es la más desventajosa en todo sentido, parece ser la cantidad considerable de agua que corre por ellas después de un aguacero algo fuerte, y en realidad las calles de Oruro más que calles, son canales, pero canales que corresponden mal a su objeto, y es de notar que ni aún en este punto presenta esta forma más ventajosa sobre la convexa. Admitiendo que la diferencia de nivel entre las veredas y el centro de la calle en la forma cóncava, sea de 30 centímetros y el ancho de la calle entre las veredas de 4 metros, la superficie de sección será aproximadamente de 1,60 m. El lomo de pescado presenta la misma superficie de 0,60 m. Teniendo la calle entre las veredas el mismo ancho de 4 metros y dando a las veredas 20 centímetros de alto y a la curva 10 centímetros. Suponiendo que el ancho máximo de un carruaje sea de 2 m., será preciso para que dos coches puedan cruzarse sin dificultad y sin tener que subirse a las veredas, dar el espacio comprendido entre estas un ancho mínimo de 4.40 m."
El doctor Constantino Morales como Prefecto y Comandante General del Departamento presentó su informe ante el Ministro de Gobierno y Fomento.
Todos o en su mayoría los trabajos adjudicados, eran posteriormente entregados por las autoridades locales. En ocasiones el Presidente de la República y Ministros que se hacían presentes solemnizaban los actos públicos. En 1907 se había iniciado la construcción desde los cimientos del Correo Central, ante la falta de fondos e interés, se dejó inconclusa la construcción al extremo de aparecer algún amigo de lo ajeno para llevarse el material acumulado, no obstante de ello, en agosto de 1911 se estrenaba este edificio. Se había previsto que toda la planta baja sea destinada a oficinas y casillas. En la parte superior funcionaba la sección de Telégrafos. En la ejecución de este proyecto habían intervenido los arquitectos Adán Sánchez y Emilio Villanueva padre de la célebre escritora Laura Rocabado (Hilda Mundy).
Una conversación amigable con el párroco, doctor Gómez del templo de Santo Domingo, logró se prosiguiera con las obras del Mercado Público.
Dentro de las obras públicas en 1908 el presidente del H. Concejo Municipal Sr. Oswaldo Peláez, se refería a la construcción del nuevo Mercado de Hierro, varias piezas se encontraban en plaza "Campero", otras en depósito de la Aduana Nacional y en casa del señor Antonio Macías, siendo necesario que el Concejo viera lo más conveniente. En la misma gestión y para cerrar ese capítulo se menciona gastos en el "trabajo de construcción del Hospital saldo del pago del Mercado de Hierro. Enumeraba párrafos relacionados a ingresos y egresos, sin embargo, a pesar de algunas observaciones denotaba bienestar "porque el Ayuntamiento había regularizado normas que motivaron a una gestión favorable".
Cuando se detalla informes con cuadros demostrativos de Ingresos y Egresos del Tesoro Municipal, la columna de ingresos describe el rótulo "Diezmos", se refiere al Presupuesto, Rendimiento, Recaudado, Saldos por recaudarse, desechando malos pensamientos u otra práctica que empañe la descripción pública.
Resalta en "Anexos- Ingresos no presupuestados. Descuento de Guerra: Los descuentos de Guerra a los empleados del Tesoro de Instrucción, de conformidad a las órdenes del H. Concejo Municipal comprendió a los profesores de todas las escuelas municipales, alcanzó la suma de Bs 477.15".
A las aceras del parque "10 de Febrero" se les puso ladrillo mosaico.
Extranjeros residentes en Oruro, lograron conseguir Cónsules y Vicecónsules de: Perú, Chile, Inglaterra, Paraguay, México, Alemania, Austria, Hungría, Argentina, Francia y España.
Un contrato con una Empresa desde 1905 vencía el año 1915, terminó el cierre de compromiso en julio de 1914, por el mal servicio y queja de los vecinos.
En próximas publicaciones iremos rememorando parte de la historia de nuestro inagotable Oruro, de ayer y hoy.
Datos: Memorias Presidentes Consejos
Municipales de Oruro.
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