Una batalla campal por la ocupación de terrenos ubicados en los cerros aledaños a la fundición de Vinto, Oruro, se registró este fin de semana, con el uso de dinamitas, petardos y abundante cantidad de piedras que se lanzaron con hondas desde diferentes sectores.
Los supuestos dueños, entre los que se encuentran comunarios de Qaqachaka, prefieren pernoctar en los mismos terrenos, porque "no se puede permitir que los Sin Techo quieran apoderarse de los predios, sin tener ningún documento, respaldados por un grupo de habitantes de la misma población de Vinto".
El fiscal de distrito, Francisco Terán, explicó que se ha enviado un grupo de policías al sector, para evitar enfrentamientos, ya que existen disposiciones legales que prohíben esa clase de actividades que están profundizándose nuevamente.
Más de un centenar de campesinos, dirigidos por el presidente del Movimiento sin Techo, Luis Alegría García, tuvo que replegarse hacia los terrenos de la urbanización de la Prensa, para "reorganizarse y para planificar la toma posterior de otros terrenos de Vinto".
Los avasalladores se encontraban con piedras en las manos, palos, hondas y dinamitas. Los policías se mantenían en permanente vigilancia en las inmediaciones del retén de Vichuloma, ubicado a 12 kilómetros al sureste de la ciudad de Oruro, para pacificar la zona.
"Tenemos que seguir ocupando los terrenos. Tenemos que sacar a los terratenientes de Oruro. Ya les hemos quitado gran parte de los terrenos y después, las autoridades municipales de Oruro tienen que aprobar nuestras urbanizaciones", afirmó Alegría, durante una concentración de sus bases.
El dirigente del Movimiento sin Techo manejaba personalmente una camioneta doble cabina, color plomo, último modelo, para controlar diferentes sectores de la ciudad, donde ya se ha producido la ocupación de los terrenos y se han efectuado construcciones clandestinas.
El fiscal de distrito, Francisco Terán, dijo que se efectuará una investigación de los hechos suscitados el pasado fin de semana y se ha pedido informes oficiales de los hospitales de la capital, para reportar la cantidad de heridos que hayan recibido, como consecuencia del avasallamiento de terrenos.
El dirigente campesino de Vinto, Alberto Tarqui, por su lado, indicó que su sector se mantiene en vigilia, para defender los terrenos que pretenden apoderarse los denominados “sin techo”.
En los cerros de Vinto, había una hilera de personas que no permitía el paso de ningún grupo de avasalladores. Los policías se encontraban en el mismo lugar, recabando información sobre los problemas suscitados.
Según los policías, "cualquier derecho propietario debe ser definido en la ciudad de Oruro, ante el Ministerio Público o ante las autoridades judiciales, para evitar esta clase de enfrentamientos, que pueden provocar muertos y heridos, porque los ánimos se encuentran caldeados en ambos sectores".
Los enfrentamientos se suscitaron alrededor del cuartel del Regimiento Braun, en la zona de Vinto. Los grupos de avasalladores corrían de un lado para otro, mientras que otros escapaban y otros los perseguían.
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