En la ciudad, se dice que el ambiente no es apto para cultivar ciertas especies ya sean florales o arbóreas, sin embargo, desde hace muchos años se pueden apreciar dos palmeras una en la Plaza 10 de Febrero y otra en la parte superior del Pasaje del Periodista.
El que esta especie se haya adaptado, hizo que surja la idea de plantar 40 palmeras más en la avenida Villarroel, desde la Brasil, hacia la Circunvalación, y existe la esperanza de que el suelo orureño permita el crecimiento de éstas plantitas.
El director de Gestión y Salud Ambiental del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO), Roger Copa señaló que si resulta el prendimiento de las palmeras, esta especie será plantada en diferentes sectores de la ciudad.
Explicó que si bien existe un gran riesgo de que muchas especies mueran, esto no impedirá que se intente introducir nuevas que vayan a ornamentar el paisaje citadino.
"Se tiene experiencia de que las palmeras se han adaptado en algunos sectores de la ciudad, sobre todo las especies fénix y abanico", indicó Copa.
Las palmeras fueron compradas de un vivero de Cochabamba, y se ha realizado un proceso de aclimatación, para que no les afecte mucho el cambio de ambiente y el trasplantado sea más llevadero.
Cada palmera costó 130 bolivianos y se ha invertido alrededor de 8.000 bolivianos, que incluyen la mano de obra, el sustrato y las plantas.
Copa dijo que la mayor dificultad con la que se tropezaría en este sector de la ciudad serían los fuertes vientos y las bajas temperaturas que se tiene en invierno, por el mes de mayo, pero que las plantas serán protegidas por invernaderos particulares que posibilitarán que las palmeras se conserven en el invierno.
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