La ley 259 no es cumplida por el Gobierno Autónomo Municipal de Oruro, al evidenciar el funcionamiento e inauguración de centros de expendio de bebidas alcohólicas, más aun cuando en varios casos estos lugares fueron clausurados de manera indefinida por la Unidad de Defensa al Consumidor, lo que a su vez pone en duda el principio de autoridad ejercido en bien de la sociedad.
Según el secretario de Economía y Hacienda del Gobierno Municipal, Carlos López, la aprobación de licencias de funcionamiento de centros de expendio de bebidas alcohólicas está sujeto a la valoración de instancias de la Municipalidad para su posterior aprobación, en base a las disposiciones de la ley 259 de control al expendio y consumo de bebidas alcohólicas, no obstante las denuncias de gran parte de la población, piden instruir el cierre definitivo de estos lugares, por ser un factor de riesgo que altera el orden por el tránsito de personas en estado de ebriedad.
Destacando el contenido de esta ley en el artículo 26, numeral segundo, claramente establece que el incumplimiento, por ejemplo, en cuanto a las horas de funcionamiento, amerita una sanción directa de 2.000 Ufv´s (4.400 bolivianos aproximadamente) y la clausura temporal de 10 días, en el caso de reincidir, corresponde la clausura definitiva.
Lo que llama la atención es que desde el Gobierno Municipal no se de cumplimiento a dichas sanciones, advirtiendo diferentes contradicciones de acuerdo a los criterios manifestados por la responsable de la unidad de Defensa al Consumidor, Rosario Illanes y el secretario de Economía y Hacienda del Gobierno Municipal, Carlos López.
LOCALES
Es pertinente situar algunos ejemplos para una mejor comprensión, en base a las denuncias presentadas por la propia ciudadanía.
No es extraño hacer referencia a los locales como, Pedro Banderas, Estrella Azul, El Chamiso, Mi Cholita, entre otros, que desde gestiones pasadas fueron clausurados, varios de ellos con carácter indefinido, pero fueron los propios vecinos quienes informaron de su re apertura días después, lo que queda en interrogantes en cuanto a las autoridades municipales que sostienen dar cumplimiento estricto a la ley.
Esto a su vez es corroborado con el criterio de la jefa de la unidad de Defensa al Consumidor, quien aseguró en varias oportunidades posterior a los operativos realizados, que son las mismas instancias municipales quienes autorizan el funcionamiento de locales faltando al principio de autoridad.
PLAZA SEBASTIÁN
PAGADOR
En otro ejemplo, se destaca la declaratoria como zona turística a la plaza Sebastián Pagador que a la fecha no es de efecto su cumplimiento, primero por no haberse concluido con el traslado del local El Castillo, mas al contrario dando paso a la apertura de otro centro nocturno en ambientes del ex Chernobil, pero con una diferencia, los servicios y condiciones de esta actividad nueva serían aptos al ser considerado "turístico", pero que curiosamente fue sancionado bajo comparendo por faltas a la higiene en la última inspección realizada por la Guardia Municipal.
"En cuanto a El Castillo, estamos esperando a que cometa una falta para sancionarlo con la clausura, no tiene licencia pero tiene padrón, el otro local ya no presenta condiciones como en el Chernobil, está sujeto a evaluación para otorgarle su licencia", indicó el secretario de Economía y Hacienda del GAMO, Carlos López.
Lo paradójico de este ejemplo es que la declaratoria expresada por el alcalde, Edgar Bazán Ortega, instruye a restringir el funcionamiento de bares y locales a menos de 100 metros de la plaza Sebastián Pagador.
CONTROL SOCIAL
Para el Control Social este es un aspecto preocupante, al hacer referencia a que "no existe principio de autoridad" en el Gobierno Municipal, ya que en los últimos años fue evidente la apertura de nuevos centros nocturnos, bajo la interrogante en verificar si cumplen o no con los requisitos establecidos, que en un efecto negativo dan mala imagen a la ciudad, además de ser generadores de riesgo en desmedro de la seguridad ciudadana.
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