En ese espacio, que hace como 30 años era un basural, colindante con la pared Oeste del Complejo Deportivo Fabril y que luego se convirtió en un espacio baldío, el año 2006 durante la gestión de Edgar Bazán como alcalde, se construyó jardineras y paseos a desnivel, además de un pequeño parque infantil.
Ingresando al parque recreacional por la avenida Dehene, se puede apreciar una escultura en fibra de vidrio, ahora un tanto descuidada, de un maestro junto a un niño, para caracterizar así este lugar dedicado a los profesores.
Sus áreas verdes tienen una infinidad de arbustos de malva violeta, una especie de arbusto que casi todo el año presenta un verdor propio y hay periodos en los que sus flores de color ciclan o violeta hacen más agradable el panorama.
Además, existe una variedad de colores de malvalocas, distribuidas en los diferentes jardines. En otras áreas están las flores amarillas conocidas como "botón de oro".
Sus pasillos tienen formas caprichosas, que invitan a caminar como en una especie de rompecabezas. El parque tiene un lugar específico asignado para la recreación infantil, con escaleras en variadas formas.
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